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| Telesilla en Kopaonik |
A cuatro horas de coche desde Belgrado y a 120 kilómetros desde el aeropuerto de Nis, el núcleo de la zona cuenta con hoteles y casas rurales para dar alojamiento a más de 3.000 personas. Más allá de un mero destino turístico, esta pequeña ciudad alberga multitud de restaurantes, tiendas, casino, centro de convenciones y una atmósfera llena de vida. Kopaonik es la estación de esquí más grande y famosa de Serbia. Cuenta con más de 50 km. de pistas, conectadas por una red de 23 elevadores y telesillas y con una capacidad total de 28.000 esquiadores por hora. También hay tres pistas homologadas para el eslalon y el eslalon gigante. Además de las pistas anteriores, en Ravan Kopaonik hay más de 20 km. de circuito para esquí de fondo y una zona dedicada al snowboard. Sus abundantes precipitaciones de nieve alargan la temporada de esquí desde diciembre hasta bien entrado abril.
En primavera y verano Kopaonik también tiene mucho que ofrecer. Declarado Parque Natural en 1981, el área es conocida por la riqueza de su flora y su fauna, la inmensidad de sus valles vírgenes y sus muchos manantiales. Este paraíso natural es el contexto perfecto para la práctica de actividades al aire libre como montañismo, escalada, rafting, parapente o senderismo (entre las rutas más significativas, el Camino de Josif Pancic, que llega hasta el lago Semetes y sus peculiares islas flotantes).
En las cercanías de Kopaonik existen importantes monumentos históricos que merece la pena visitar. Son, sobre todo, monasterios catalogados como Patrimonio Cultural por la UNESCO, como el monasterio de Studenica (el más importante de la Iglesia Ortodoxa Serbia). A través de escarpadas pendientes se alcanza la ciudad fortificada medieval de Maglic, desde donde se obtienen vistas impresionantes de la Garganta del Ibar. La zona es también famosa por sus aguas medicinales y sus spas: Joshanicka, en la misma Kopaonik, y Mataruska, Vrnjacka y Bogutovacka en un radio cercano.
Stara Planina y Babin Zub
Stara Planina es el macizo que conforma la frontera natural entre Serbia y Bulgaria. Stara Planina representa un modelo único de desarrollo sostenible del turismo tanto por su sentido arquitectónico como por su paisaje, y se encuentra en pleno proceso de expansión.
En primavera y verano Kopaonik también tiene mucho que ofrecer. Declarado Parque Natural en 1981, el área es conocida por la riqueza de su flora y su fauna, la inmensidad de sus valles vírgenes y sus muchos manantiales. Este paraíso natural es el contexto perfecto para la práctica de actividades al aire libre como montañismo, escalada, rafting, parapente o senderismo (entre las rutas más significativas, el Camino de Josif Pancic, que llega hasta el lago Semetes y sus peculiares islas flotantes).
En las cercanías de Kopaonik existen importantes monumentos históricos que merece la pena visitar. Son, sobre todo, monasterios catalogados como Patrimonio Cultural por la UNESCO, como el monasterio de Studenica (el más importante de la Iglesia Ortodoxa Serbia). A través de escarpadas pendientes se alcanza la ciudad fortificada medieval de Maglic, desde donde se obtienen vistas impresionantes de la Garganta del Ibar. La zona es también famosa por sus aguas medicinales y sus spas: Joshanicka, en la misma Kopaonik, y Mataruska, Vrnjacka y Bogutovacka en un radio cercano.
Stara Planina y Babin Zub
Stara Planina es el macizo que conforma la frontera natural entre Serbia y Bulgaria. Stara Planina representa un modelo único de desarrollo sostenible del turismo tanto por su sentido arquitectónico como por su paisaje, y se encuentra en pleno proceso de expansión.
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| Stara Planina |
La estación de Stara Planina consta de tres descensos habilitados tanto para practicar esquí como snowboard: Konjarnik, Sunčana Dolina y Markova Livada. Las pistas están acondicionadas y cuentan con modernos telesillas con capacidad para más de 1.200 esquiadores por hora. Estas estructuras han sido diseñadas de forma que respeten las rutas naturales de la montaña y, al mismo tiempo, sigan las pendientes más atractivas para el esquí. Asimismo, el descenso Markova Livada está iluminado para permitir la práctica de esquí durante las horas de menos luz. Las pistas tienen un nivel de dificultad intermedio y avanzado así como una zona para principiantes. Debido a su localización y altura (tienen una media de más de 1.500 metros), estas montañas permanecen cubiertas de nieve durante más de cinco meses al año. Aún así, si las condiciones climatológicas no son las adecuadas, el centro tiene instalados cañones de nieve artificial.
Junto al centro de esquí de Stara Planina se encuentra la Reserva Natural de Babin Zub en la que, durante los meses de invierno, se puede realizar esquí alpino en un entorno natural protegido e inalterado, mientras que el resto del año, gracias a la altura de sus cumbres, se convierte en todo un desafío para los alpinistas. Además, el centro turístico vacacional de Stara Planina no es sólo una estación de esquí, sino que también es el primer centro turístico vacacional de año entero en el sudeste europeo: en los meses más cálidos, en Stara Planina se organizan actividades recreativas relacionadas con la Naturaleza como el parapente, el ala delta, la pesca o el senderismo.
Junto al centro de esquí de Stara Planina se encuentra la Reserva Natural de Babin Zub en la que, durante los meses de invierno, se puede realizar esquí alpino en un entorno natural protegido e inalterado, mientras que el resto del año, gracias a la altura de sus cumbres, se convierte en todo un desafío para los alpinistas. Además, el centro turístico vacacional de Stara Planina no es sólo una estación de esquí, sino que también es el primer centro turístico vacacional de año entero en el sudeste europeo: en los meses más cálidos, en Stara Planina se organizan actividades recreativas relacionadas con la Naturaleza como el parapente, el ala delta, la pesca o el senderismo.
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